6 formas de evitar decir malas palabras

by - mayo 15, 2019

maldecir


“Sos un inútil, bueno para nada”, “Te odio, perro desgraciado”. Cerró la puerta y salió huyendo como un pájaro en el desierto.

Bosco Fernández Rivieros quedó tirado en la alfombra Nepalesa, con una botella de ron al lado y un incendio en la occipital de su cerebro que le provocaba auto destruirse y sucumbirse en la tristeza cósmica cuando alguien no sólo te deja, pero te ofende de esa manera.


Vivimos en Nicaragua, donde es normal tirar los riendazos con la boca, incluso a nuestros mejores amigos les decimos “Que pasó loco” – en el mejor de los casos – teniendo en cuenta que también naturalmente se dice “Que pasó hijue…”. Siempre tenemos una lista de malas palabras.


Que nivel de daño estamos haciendo y ni cuenta nos damos. Estás quemando la ínsula en la corteza prefrontal del cerebro de esa persona, causando sutilmente, directa o indirectamente, que esa persona esté más propensa a deprimirse, bajar su auto estima, perturbar su concentración en el trabajo, y experimentar ataques de ira. 


Consecuencias de decir malas palabras o de ofender a las personas con groserías


El neurocientífico Ricardo Castañón explica a cabalidad que las palabras además de transmitir ideas, también son sonidos, con ciertos decibeles, que producen un estímulo físico en el cerebro.



Vos y yo somos nicaragüenses mal hablados y debemos de mejorar, debemos de ser un verdadero ejemplo para nuestros hijos, una persona sosegada, equilibrada, limpia de labios, elocuente, y que todo lo que salga de nuestra boca sea música para los oídos de los demás. Vos y yo necesitamos ser agentes de bendición para los que nos rodean.

Te voy enseñar 6 maneras para que seas un nicaragüense de boca limpia, y no un depredador asesino de tu prójimo que causa daño con su boca incluso al saludar:



1. Dejar de ver mucha televisión y mejor crear tu propia identidad


Debes aterrizar a tus raíces, darte cuenta que no sos Bruce Willis o Mel Gibson en 'Arma Letal', que de la manera más cándida y con un cigarro en la boca puede maldecir y hacerlo ver cool.

Usualmente tendemos a compararnos con otros, en particular con las celebridades, y creemos el engaño de que siendo como ellos o imitándoles, vamos a ser mejores personas o seremos más aceptables dentro de los estándares sociales.



no veas television


No, hermano nicaragüense, vos no sos Mel, sos un nicaragüense ejemplar, trabajador, caballero o dama, con un tacto tan suave, una lengua tan dócil, que puede convertir un muñeco de algodón de azúcar con su manera poética de hablar. Por tanto, dejá de identificarte ya con personajes ficticios y volvete alguien real, con una personalidad propia, y con tus propios atributos, y no romantices más el mal hablar o el maldecir de todo a quien ves en tu televisión...o Netflix, ahora.



2. Empezar a cultivar el hábito de la lectura


Leer más está científicamente comprobado que trae tremendos beneficios para tu cerebro. Entre más leas y aprendas vocabulario, tu léxico será más limpio, usarás las palabras adecuadas para expresar sorpresa, enojo, o alegría, y no serás el mismo bocatero que para todo suelta ese riendazo, chirrido espantoso, que es una mala palabra.


la lectura


3. Ser un ejemplo para tu sociedad


Sin duda que decir malas palabras te pone en un mal plano ante la sociedad. No importa lo que penses o por mas que estés en círculos de gente libertina, siempre se ve como alguien sin cultura, vulgar, nada refinado, e inmaduro. No es por nada que hasta censuran las palabras con el famoso beep en los show de televisión, y en las redes sociales te pueden cancelar tu cuenta si abusas verbalmente de alguien.


diciendo malas palabras


Así que hoy pensalo bien pues evitando decir malas palabras, vas a volverte un ejemplo para tu sociedad, para tus hijos, vas a poder mejorar tu comunicación y tus relaciones interpersonales.


4. Tapando tu boca o salir huyendo


¿Te acordas de esa famosa comedia de Jim Carrey titulada 'Mentiroso Mentiroso'? Cuando Jim comenzó a decir la verdad, era tan abrumador para él que decidía muy chistosamente e involucrado en situaciones embarazosas, tapar su boca, tirarse al suelo, revolcarse, o salir corriendo. 

No te estoy invitando a que actúes como un desquiciado, pero necesitás cesar de hablar, disimular o lo que sea cada vez que salga una mala palabra de tu boca e irte a un lugar a reflexionar, y anotar el momento en que dijiste esa mala palabra u ofensa, para que vayas documentando cada daño que haces con tu boca, y eso ayudará significativamente a ir cesando las malas palabras. 


5. Esta batalla no se gana solo 


Comunicáte sin pena con alguien de confianza, sea con tu pareja, o alguien cercano y explícales que estás en proyecto limpieza bucal, y que necesitas que te alerten cada vez que digas una mala palabra. Al comienzo vas estar fastidiado por que te van interrumpir cuando hables, pero debes de aguantar, por que te están dando forma como a un hierro torchado para ser un hermoso modelo decorativo en el hogar.


6. Ponele un poco de humor a la cosa


Empezá a sustituir las malas palabras por otras que no tengan nada que ver. Te hará ver más interesante y crearás una atmósfera más saludable en tu hogar con un poco de humor. Por ejemplo, Nicolas Cage en la película 'Matchstick Men', profería la palabra “Pigmeos!” cuando quería maldecir. Vos, por ejemplo, podés decir ‘Perrerreque!’





Conclusiones


Ánimo, hermano, vos podés hacerlo. Sólo necesitas recordar la magnitud del daño que haces al proferir juicio contra las personas o decir una mala palabra. Cuando estés consciente que activas un pantano de negatividad, y consecuentemente un daño físico en la otra persona, te vas a dar cuenta que decir malas palabras no es nada grato.

Vos debes de perseguir ser un nicaragüense diferente, vos no sos el típico Nica mal hablado. Vos sos alguien culturizado, competente, expresivo, elocuente, suave, una mezcla de Marlon Brando y Paul McCartney, con una fina voz que transforman todo su entorno.

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2 Comentarios

  1. Claro! Estoy para servir. necesitamos mejorar en todas las áreas de nuestras vidas y para ser integrales hasta tenemos que moldear lo que sale de nuestras bocas.

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